Cuando la luna se queda a solas conmigo y me atrevo a hablarle como si fuera su amigo, le pregunto siempre lo mismo , quièn la colocò a ella en mi camino. Y no creo en eso del destino, ni en horòscopos chinos, ni en brujos, ni en adivinos ; tan sòlo creo en un amor sencillo nacido del sincero cariño. Creo en un sentimiento honesto que nunca mida un beso , que derrame el corazòn por encima de cualquier razòn. Y el rocìo de la noche parece saber la verdad que esconde bajo su nombre, con su escarcha de plata, serena cada mentira de su boca. Y no creo en eso que he sufrido, en contar que soy vìctima de lo vivido; creo en la verdad en aquella que tu nunca sabràs contar. En una làgrima caìda de un alma en libertad, para quien el amor no sea tan sòlo otro capìtulo de una noche màs. Autor : Martin Lunary