Hojas que caen en la plaza
de mi ciudad
bailan y oscilan antes de desplomarse,
el viento las eleva pausadamente
llenan de color el sucio pavimento.
Recuerdo las hojas recolectadas
para la tarea de artes plásticas,
hojas café, amarillas, rojizas,
perfumadas por el ambiente otoñal.
Unidas en el blok de dibujo
junto al pegamento y al roce de mis manos
ellas querían jugar y brincar
al son de la nota educacional.
Miles de hojas
forman alfombras en la vía pública
donde pies cubiertos y descalzos
las acarician con el roce natural.
Hojas de otoño, hojas de Valdivia,
mi bella ciudad
qué vistosas las diviso
son las que pinto y plasmó en un
brillante papel.
Hojas de tantos otoños
que han pasado por mi vida
vivencias de pubertad, adolescencia
y adultez, ¡qué suaves son!
al son del viento austral. Londres