Fuiste la simiente de lo que ahora somos,
Unos hijos llenos de todo lo tuyo,
Con tu corazón repleto de amores
Nos diste tu ejemplo, y todo tu orgullo...
Con carácter fuerte y tierna mirada
Nos hiciste libres, llenos de esperanzas,
Tus consejos fueron capítulos vivos
De sabiduría de paz y de tino...
Mano suave y dura, sonrisa y enfado,
Sabia tu palabra, consuelo oportuno,
Sembraste la unión con toda tu alma
Y en la tempestad, pusiste la calma...
No se si llamarte mi mejor amigo,
Maestro, adivino, mi estirpe, mi aliento,
Solo sé que fuiste mi amor verdadero,
Fuiste Nuestro Padre, !Por eso te quiero!
¿Donde estas que ya no escribes? ¡ dinos que ha sido de ti!, es quizas que no pecibes el vacio que hay aqui.