Octubres en tu mirada...la pista fluorescente
el halo del parámetro, seco y delirante,
el punto de partida...el flash de un instante
empezar a penetrar, mis versos en tu mente,
la voz que perforó mi éxtasis balbuceante
el percibir el sentido tácito de tu vida,
husmear la realidad, en un norte de salidas
de aquella burbuja que penetré cual un diamante,
el jaque, omnipotente, férreo y fulminante,
el juicio y castigo, de mi alma en tu diadema,
la flor de un marzo...el abril que me quema
el límite que pasa, a un sitio vacilante,
y este refugio en tus brazos irradiantes
que me llena el día de noches valederas,
es que estás mujer! besando mis veredas
regalándole la paz, a aquella muerte extenuante,
pues el mundo del sigilo te vistió oscilante
en cada diéresis que cayó en mis miradas,
cual la metáfora aquella que del todo y de la nada
me trajo la pureza de amar...y de extrañarte!