Perdidas...

Donde quedaron mis deseos, mis sueños
esos que colmaban de luz toda mi vida
si el tiempo cruel con incesante empeño
puso su sello de finitud a mis medidas.
No fui testigo del instante en que la suerte
tergiverso en ocaso mi renacer soñado
no pude luchar contra ardides de la muerte
que cubrió de oscuridad el cielo imaginado.
Y pese a mis ruegos, se que todo fue vano
porque el pasaje de vida es hoy fracaso
odiando al tiempo en su secuencia y planos
que cambiaron mi alborada por ocasos
Acaso alguien sufrirá por mi alma dolida,
o entenderá quizás mi cruel desasosiego,
de esta perdida brutal, sin tasa ni medida
para el cual es placebo, lagrimas y ruegos