Los ojos de mi alma felices te miran
a travez del tiempo y la distancia
y al contemplarme, los angeles suspiran
al ver que te amo con mucha constancia.
Eres, Mi Helenita, mujer con elegancia,
tienes, Mi Helenita, de Venus, la belleza;
si ha sido bella y muy feliz tu infancia,
te has transformado ahora en mujer de realeza.
Yo se que tu deseo es tenerme a tu lado
para que la felicidad nunca termine.
Helenita, Mi Niña, ahora que te he hallado
anhelo que la dicha tampoco culmine.
No mas sufrimientos tendras en tu vida,
no mas sufrimientos en cosas de amor,
sonrie a la vida Helenita querida,
sonrie porque ya no tendras mas dolor.