Despertar del sueño dormido

Hoy después de tanto sueños dormido
el ángel bueno me dijo que podía
demostrarle mi real amor si quería;
esclarecer anhelo vetusto presumido.
Mi duda dura tan solo un segundo,
a mi amada expuse mi sentimiento
en la primera ocasión, lo que siento
digo para adentrarme en su mundo.
Con gracia angelical oí su repuesta,
suficiente para sentirme honorable,
sus palabras son de una mujer amable
que no elude mi humilde propuesta.
Mi restazo tiempo no creo perdido,
ahora viviré mi sueño dormido.
Autor: Alcibíades Noceda Medina