Piel...

Sé lo que dicen tus ojos, niña,
con la mirada.
Veo ventanas que abren cielos
que adivinas...
y estás sola.
Y abres tus lábios de esa forma
que sabes, me incitan al deseo,
cuando tu instinto los muerde
y aparecen sus destellos...
Y se me ahoga el aliento
cuando al mirarte descubro
como deshojan tus pechos
sus latidos y mi anhelo.
Brilla húmedo el deseo
que escapa a tus orillas,
como en mi pecho la vida
galopa fuerte y vencida...
Y sé que todo mi ser
se hizo vida entre tus labios
cuando aturdido y poseso...