Como este, ninguno...

En el tema mas abstracto
de la humanidad
se acomplejan
diferentes historias,
el amor a ratos
o por toda una eternidad,
con orgullos
o reproches pero
como este ninguno,
lo dejamos descansar
por el poco uso
pero mujer,
sabemos que es real
al desearnos
o al besarnos,
es inusual
que levitemos
al rosarnos,
a pensar
en las noches
por cada cual,
a sentarnos
a platicar
acabando en sueños
de cama,
al esconder el rubro
en besos de escaleras
o rápidas
entregas
en un estudio,
sin nupcias ni compromisos
el amor como este
ninguno.
No es normal
subir a la azotea
y buscarte en estrellas,
pintar un arreglo
colorido y floral
en tu piel,
subir al cielo
al tocar
tu pequeño pie,
el que dejes tu dignidad
a un lado
y el tabú
de la edad,
si te enchino los poros
al tocar tu mano
y al entrar
lentamente con una
caricia en tu entrepierna,
al comer de tu punto
y embriagarme
de tu vino en cenas
que en lugar
de platillos
como de tu cuerpo
y sin una mesa
con cubiertos
solo el asiento
trasero de un coche,
esto es ejemplar
para lo prohibido,
un deseo obscuro
y espectral
que con solo
hablarnos al oído
vemos pasar
la ráfaga de un nido
de gamas universales
que se llegan a quedar
en nuestros dedos
diferenciales
por nuestros cuerpos,
por tus tatuajes
y el centro
de tu vientre profundo.
Para terminar
este estudio de amores,
te invito
a que me invites esta noche
a dormir en el pliegue
de tu silueta,
a envenenarme absurdo
y sin cura de tu
perpleja
perfección,
y creo merecer
una buena oportunidad
para pelear por tu ser,
solo debes de aceptar
lo que sientes
en el mudo
silencio, y solo
tienes que contestar
que realmente
el amor
como este,
ninguno.