Porque fui....

Porque fui un estepario e intransigente
niño de luchas y adolescente perdido,
con valores e ideas que permanentes
valieron la pena a pesar de los olvidos.
Porque fui mentor y aprendiz al mismo tiempo
de una historia de sangre sin memoria,
a través del orgullo y de un sentimiento
que soplaron agudos a través de la historia.
Porque fui el mercader de ciertas parodias
y batallas de tristes saldos perdedores,
y al recorrer las derrotas y aún las victorias
la sangre enaltece la sublimidad de sus dones.
Porque fui instrumento y pasión de grandeza
y me viste descalzo correr por los llanos,
con los pies imperfectos de ardor y belleza
con las marcas del cuerpo y el rugir de las manos.
Porque fui el artillero de un amor inconstante
cual un pájaro herido que voló sin receta,
amante de la libertad y de aquellos instantes
soberbio valor de ilusiones imperfectas.
Porque fui el obrero de miles de marchas
abrazado a la vida y a la muerte incipiente,
porque fui y al haber sido luchador de batallas
me siento dormido en el horror permanente.