las plazas

Otro frío de san puta
Cocinando los huesos
De un invierno que te sedujo
Embaucándote.
Te olvidas de secar los domingos
A la sombra de tu pena.
Alguien golpea el sueño
Que habías mordisqueado
En un pasillo de la ilusión.
Esa chica era una estatua
Parada en la plaza
Que nunca te atreviste a ignorar.
Ahora marchas a romperte el hígado
En un vino amargo.
Atrás tuyo otro invierno
Te devora la sombra
Y ella allí, dura, en una plaza cualquiera.