Quiero de ti, la marca de un pecado,
el desecho de besos en tus sombras,
la pudiente ansiedad de la pobreza
el éxtasis pleno que hoy te nombra.
Quiero de ti, todo lo que has soñado,
la antítesis de probervios y realezas,
el hambre del cuerpo que te asombra
cada vez, que te entregas a mis labios.
Quiero de ti, la plenitud de un solsticio
la luna llena de tantas sutilezas,
verte dormida, entre vástagos extraños
donde calla el dolor y grita la pureza.
Quiero de ti, madreselvas y jazmines,
ser el poseedor de todos tus vicios,
el enjambre de tanta naturaleza
que baña mi alma...si tu se lo pides!
Quiero de ti, el encanto de tus enaguas
el celeste vestir, de una tarde nublada,
la inquieta virtud de tus tantos indicios
pistas que me llevan, a desearte sin palabras.
Quiero de ti, que desnudez tus entrañas
el brillo de tu piel, callar hasta matarme,
quiero morir de amor y si me extrañas
verme en esa estrella, que tan tuya, me desangra.