sólo quiero tu verbo enfrentando mis ganas...

Como tromba marina, entre fuertes vientos
Entraste a mi vida un día
Sacudiendo mis cimientos
Para después mantenerte en lejanía
Y absorta en el espejo de mis propias convicciones
Aturdida de promesas que en el pasado fueron hechas
Dejo caer dos lágrimas sin negociaciones
Lamentando haber idealizado, la aventura que planteaste tan estrecha...
¡Y es que de porcelana no estoy hecha !
Por mis venas corre sangre, que hoy tú derramas
Al romper mi corazón con tu distancia...
Y en mi piel se siente el triste anochecer
Por amanecer en otros brazos aquí en mi cama
Y es que ya no quiero ser...
Y es que ya no quiero otra cosa...
Más que tu verbo enfrentando mis ganas...