Mi bohemia...

Al fondo de la pequeña taberna, en la mesa de siempre, tomando el vino barato de siempre, con su pluma de siempre y con los pensamientos de siempre; está el viejo poeta fantaseando realidades como cometas al pairo, a la espera de ver su mente parir nostalgías y alegrías, parir verdades y mentiras, parir causas y efectos de sueños vencidos por falsos caballeros...El está esperando que de su parto de poesía nasca la esperanza perdida...
Su barba cana reposa en la cuenca de su diestra, apoyado sobre el tablón de la mesa desgastada de siempre...desgastada por el paso de las copas y de conversaciones étilicas conjugadas en pasado poco perfecto...Sus sienes acusan el gris de los años y su largo pelo, tocado con la vazca boína negra, caé sobre sus hombros como el tiempo sobre su cuerpo...
Su otróra agíl pluma garabatea letras en el arrugado papel de la vida. Ya es más lenta la fluidez de su verso, pero es más profundo por lo agudo de sus sentidos... las palabras convergen como pétalos en llanto para plasmar su bohemia sobre un papel que ya no es blanco...
Y escribe el viejo poeta....
De mi existir solo mi bohemia acompaña mi larga noche oscura, ella me da rumbo en circulos de prosa conque manchó mi papel que quedará ahogado sin saber porque...Y así quedará guardado en la tercera gaveta de la nada, de ese armario viejo como yo que contiene mis vivencias, mis amores y mis nostálgias....
Mi bohemia es fuego convertido en arena de playa, que al pisar sobre ella dejo mi huella en la distancia...dejo la marca de mis pasos, como dejé esúlpido mi recuerdo en el alma de quienes he amado... Muchas cosas son mi bohemia...ella es como una caricia al frágil cuerpo de una mujer, que se marchó al ver que había más amor a la bohemía que a lo profundo de su ser...
Y sigue el poeta divagando sobre el papel que cubre su mesa....
Mi bohemia es el sufrimiento del árbol noble, que perece de triste soledad, y que ve como sus ramas se desprenden sin que nadie riegue sus raíces calcinadas por el calor de la vida y el dolor de sus entrañas....
Otra copa del vino barato de siempre bebe el poeta, mira entre el humo y se pierde su mirada...
Mi bohemia es tambén alegría...-continua el poeta-es alegría plasmada en sonrisas, y cánticos infantiles que reverberan sobre el azulado cielo. Mi bohemia es felicidad sentida sin vácio y también es la brisa que humedece el rostro del marino, cuando el mar levanta sus olas para impedir que llegue a su destino...
Mi bohemia también son mujeres de amores firmes como sus pechos, mi bohemia es también la humedad entre dos cuerpos, es la pasión encerrada en un pebetero del altar mayor de un convento... Es conocer un cuerpo de mujer con los sentidos despiertos y recorrer cada palmo de su piel como un caminante a paso lento...Es estimular los sentidos entre sábanas de un aposento, es llenarlas por amor y no por descontento...Es vibrar junto con ellas en el momento, en que el éxtasis llega para mojar de sexo los lugares más bellos de nuestro universo...
El poeta alcanza otra copa sin poder ver el cielo, su mente ya cansada desea no seguir pariendo versos...
Mi bohemia también es canto a la dulzura, es un canto sin dinero, ese canto que amalgama la inocencia de un sueño...Es como cuando el agua del río acaricia el vientre de la que era una virgen moza, que pide perdón cuando deja correr sus gotas para borrar las huellas de una noche loca...
Miles de cosas es mi bohemia, son tres rostros que dejo atrás, para que cuando me búsquen sobre mi palida tumba de poeta, puedan encontrar mis sueños en el viejo armario, en la tercera gaveta de la nada que contiene mis vivencias, para que encuentren manchados de tinta mis versos y las canciones que parió mi bohemia...
Una lagrima corre por la arrugada mejilla del poeta mientras apura la última copa de una noche eterna...
Esta pronto mi partida y con ella mi bohemia, así pienso cuando tómo esta mi última copa, del vino barato de siempre, al fondo de la taberna del puerto, con mis pensamientos de siempre compartiendo un adios con mi mesa de siempre...
Nos iremos solos - mi bohemia y yo- como así nacimos y como nacio ella dentro de mi, nos iremos metiendo poco a poco en el descanso eterno, bajo esa tierra donde esta nuestra tumba, y sobre ella creceran flores de poesía, creceran canciones de amor, creceran bohemias como la mia, en forma de ramitas verdes donde colgarán sus infantiles sueños, los niños al regreso del colegio, donde cortarán pétalos de esas flores los enamorados de mañana, y guardaran en sus libros hasta que sean ya un recuerdo....
Sí un recuerdo de la tumba del poeta, y de la bohemia de su tiempo...