En el campo y sus rincones,
trepas por el monte lleno de vacío
y encierro y caer sobre los llanos,
con su respiro de olvido.
No has sentido en la tarde o el repecho,
de la avenida con sú dorado manto o sú aire tenso,
cuando salgas al campo mira su palidez,y se van quedando,
las tristezas envueltas en el celofán del rocío congelado.
Es sana epidemia que nos invade con su tos cansada,
las manos del campo y el viento de la tarde,
La estación es una primavera vieja gastada,de tanto
dar su roce de violetas y césped.
Te espera el viento,
vestido con silencio,
visita sus salones acampa donde el aire aguarda en lo más,
esperanzado de la tierra y los vientos.
Copyright 2007
2/24/07
autor: sagitaria del mar.
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