Como quien profana la
cúspide de un beato,
o como el mar lleva
al viento su inmensidad,
como tiene mi sueño
un poco de tus ratos
o como tu espejo
se deviene a mi humildad.
Como quien venera
lo mucho que no tiene,
o como la sangre
hace huellas en mi portal,
como tiene el dogma
siglos de parabienes,
o como tus besos
transitan mis mas allá.
Como quien persigue
la sombra de un exiliado,
o como el anillo
que nunca te sacarás,
como tiene la norma
papeles de equivocados,
o como nuestra historia
no los tendrá jamás.
Como quien pelea
contra molinos de viento,
o como tus ojos
me mirán en profundidad,
como tiene el brillo
de tus pupilas aliento,
o como esperas
el verme en la oscuridad.
Como quien te ama
con la gloria de una espada,
o como las paredes
de tus murallas defenderás,
o como esa nostalgia
que duele y se ampara,
en caricias de fuego
que en mi invocarás.
Como quien pernocta
en tus noches silente,
convocando estrellas
que algún día te pertenecerán,
como este hombre
que no le teme a la muerte,
porque en cada huella
tu nombre encontrará!