Sancochado (sopa peruana)

Mañana serena, de vientos frescos, que animan a caminar por la montaña o por el lindero de las playas de efervescencia romántica para abrir el apetito y esperar al mediodía un humeante sancochado, con todas las de la ley, como Dios manda, pronto se escuchará los armoniosos cubiertos, cuchara y cuchillo para terminar con una sabrosa carne, teniendo como marco musical el vibrante sonido de las copas de cristal y decir un salud… por mi Perú.