Frente a un espejo

Hay un cristal que yace y reanima los semblantes

Con sus gélidos pasajes irradiando necedades

Con su gran valentía para exponer las verdades

Con su gran ceguera para ocultarnos instantes.

Al mirarnos en ese espejo nublado de vapores

De nubecillas opacando menguando los reflejos

Reposando inmaculadas adentrando sus festejos

Ocultando las miradas para entonar los dolores.

Será ese duelo el que para siempre se alista

Será un consuelo con su gran brisa descollante

Sera la palma ... mas sincera que la vista?

Seran axiomas los destellos del instante?

Una mascara en figura que dialoga sin hablarte?

Sera tu fiel espectante ...el pregon de la verdad?

Si cotejamos uno a otro... habrá ecuanimidad?

!Su mutismo expreso sera siempre su estandarte!