La estrella del navegante
Con el corazón en la mano, quiero decirte, que tu existencia, es como
la estrella que guía al navegante en aguas desconocidas, sin ella, jamás podría arribar al puerto del amor.
Que seguiría al garete en medio de la espesa niebla, sin llegar a ninguna parte, teniendo como norte el desconcierto y como abrigo, la soledad.
Que nada ni nadie mas que tu voz, puede ser la campana de la boya, que señala el ingreso a la rada segura.
Al disiparse la bruma, veo dos luces que me indican el muelle donde debo atracar para siempre mi barca.
A medida que me acerco, brillan con fulgor dos puntos luminosos, si, son tus ojos, que inquietantes, esperan mi arribo.
El palpitar de mi corazón, tapa los quejidos del viejo motor, cuyo traqueteo me hace saber que ya nunca mas me alejaré de ti.
Rodeando tu talle con mis cansados brazos, fundímonos en un largo y apasionado beso, pudiendo ver el gran disco en el horizonte que con su suave luz nos indica que un nuevo día está naciendo, y con él a nuestras espaldas, reiniciamos muy juntos, el largo camino de la vida
® Susana Valenzuela