Ven!

Ya no se de tus caricias, ni de tus mimos
en una tormenta de recuerdos estoy perdido
gotas de lluvia lamentan un corazon frio
el ventanal arrulla mis ojos tristes, por ti, poseidos.
Que sera de tus labios, de su calor,
dime!...que se hizo?
busco tu regazo para mis cabellos,
lejos, no lo concibo;
acaso este es el pago de la tanta dicha
que tube contigo?
acaso tanto extasis de los sentidos
sera prohibido?
Diosa del alma, necesito tu mirar nocturno
de pasion y vino
preciso las curvas de tu piel; tu respirar
me sirva de abrigo
ven! aun te guardo en mi alcoba, en mi caminar,
en cada palabra que digo
Ven! eres melodia en mi despertar...sin ti me hallo perdido.
Hugo Dante Tortorelli