Donde el sol no te acaricie mis manos
serán el húmedo cristal
de sensaciones que devuelvan
la magia permanente
de caricias en vigilia,
tendrás mi perfume siempre
presente, a pesar que la distancia
tenga el placer amargo
de separarnos,
oirás mi voz, como todos los días,
pasearse incansablemente,
por los silencios de
tu cuarto,
y llevarás mi estigna
el último que surcará mi vida,
para que no olvides...para
que no sufras.
Donde el sol no te acaricie
frente al mar, que a tu ventana
golpea, cual ese gorrión mensajero
que te lleva mis versos
cada mañana,
verás mi sombra desplegarse
a modo abrazo eterno, para
que la soledad nunca
te contenga.
Nunca habÃa leeido algo que me calara tan hondo el alma,escribes muy bello,además me identifico mucho con tu poema SIGE ASI!!!!!!!!!!!!!!!!!!