Desespero.

No te encuentro...
y las diásporas me enceguecen
de gritos, de ausencias inesperadas,
solo el paso que las horas
saben que te merecen,
donde se esconden
las mediatrices de las miradas,
No te encuentro...
y desespero en sinuosas
paciencias abstractas
de temblores cercanos,
donde devolverte una rosa
es concluir..en un te amo!
No te encuentro...
y sé que lo mismo sientes
extraña pasión de
esos olores parecidos,
cual un diáfano
apocalípsis que no miente
ni permuta obligaciones
de sentirnos inhibidos,
No te encuentro...
y te busco en los rincones
de una voz que alivia mis mañanas,
esa que llevo a modo de sensaciones
cuando no te hallo
en cada verso que derramas.