Silencio de un poema

Este poema posado en mi mano

ha sido escrito por mi vida,

quiero terminarlo en silencio,

a la sombra del horizonte de mi alma

Que me habia visto,

niño oscuro y pensativo

jugando a la sombra del ramaje espeso,

y arriado al pabellon de mi orgullo

Venia a depositar el verso

sobre la tumba de mi madre,

a cuyo lado ansiaba abrir la mia,

para dormir en ella,!eternamente!

Habia vuelto la espalda al tiempo

y,lo veia diluirse lentamente,

en una linea de horizonte,

de la vejez tan cercana a la muerte

No venia a luchar con el tiempo

sino a reposarme en la tarde de su vida,

a la sombra de ese pedazo infimo de respiro

Veia como una eterna

sensacion de voluptiosidad retrospectiva,

surgia lentamente ante mis ojos,

una silueta quebrante de un siglo

Se diseñaba mi estancia

de un ser encadenado

en un gris tierno de palida ceniza,

que cubria el horizonte de uno como polvo,

de gema aurifera,!despedazada!

Raul T