Fue una noche lluviosa.
Cuando vi su figura parada en la puerta,
su rostro, tenía las huellas del tiempo,
sus ojos sin brillo, su mirada muerta.
Con su voz pesarosa.
Se mostró arrepentido de un día dejarme,
por correr deslumbrado, tras una quimera,
lo miré con fría pena, sin recriminarle.
Mis palabras muy pocas.
ya el tiempo pasado no se recupera,
hace ya mucho tiempo, fue un dolor muy grande,
y el vacío que deja un amor, alguien llena.
Lo observé alejarse.
Con un mórbido adiós retenido en sus labios,
Se alejó bajo el agua, con paso inseguro,
era yo, quien otrora sufrió los agravios.
Sentí sólo tristeza…
Al pensar que él ya nunca, tendría un mañana.
Cerré la puerta sin sentir remordimiento,
y volví a quien estaba, esperando en mi cama.
® Susana Valenzuela
03-10-09
Con cuanta razòn y sentimiento plasmas una verdad..cuando un amor nos deja..otro llega..llena nuestro vacìo y se queda. Belleza de poema mi princesa Susy mi diez SUPERGRANDOTE besos ruidosos como los tuyos desde Cali-Colombia hasta la Cuna de una de las grandes MERCEDES SOSA DE ARGENTINA yolita