siranium

será cierto que no llueve

cuando el bosque palidece...

dicen que aun cuando la garua

lo visita

sus ojos tristes se cierran

para adentro de su alma

quién sabe que tormentos

lo asaltan

y le ven sumando troncos

pesados, gruesos

silenciosos cuerpos sobre sus verdes alas

cual desgracias que esperan la señal...

dicen que ayer llovió mucho, 

que sobre el campo no se le puede ver

y que en la tierra sola ha crecido 

un poco de mala yerba

me da miedo acercarme

hay otros que se animan

yo no

yo creo en aquellos que dicen

que este mal tiempo 

es hijo de sus penas

yo sí les creo cuando dicen

que anoche vieron

al caballo ardiendo

cruzar la madreselva

y tras él la tierra, el polvo

el bosque que le seguía

como arrancado de su alma...

Ya nadie en la isla se llama Gabriel

ya nadie se va al bosque

a jugar con espines dormidos

ya nadie escucha su nombre

su alegre nombre por la mañana...

dicen que ha de volver 

corriendo tras el polvo

seguido de pájaros alegres 

y una rama entre los dientes

dicen que buscará a su madre

para oler su perfume

y caerá a sus patas

para lamerlas tiernamente

dicen que será pronto...

yo buscaré el manatial

donde solíamos chapotear

todas las mañanas.