Duerme:
Con ese rostro apacible
que me dice que descansas,
del dia ajetreado, del juego,
y de sueños recreados.
Duerme:
y sueña con el día de campo,
con el salto de la cuerda
y tu bicicleta chueca.
Duerme..
y descansa de este día
que me dió tal alegría
al verte feliz, jugando.
Duerme...
pequeñito mío,
y sé feliz, mientras yo cuido,
que jamás te falte nada.
Duermes...
y veo tras esa sonrisa,
las travesuras del día,
los amigos que ayudaste
a defender el castillo
cual caballeros andantes:
Duerme...
mañana, mañana serás mas grande,
lo muestran tus pantalones,
y el gesto de independencia,
con el que vas a la escuela.
Duerme,
chiquillo de mi alma,
que no porque sea tu hermana,
no te amo como una madre.
No fuiste mi hijo, pero te quiero como si lo fueras. Sergio.
Nunca habÃa leeido algo que me calara tan hondo el alma,escribes muy bello,además me identifico mucho con tu poema SIGE ASI!!!!!!!!!!!!!!!!!!