Vasos vacíos, conciencias llenas, abstracciones débiles, de débiles carnes, situar el lugar de un encuentro furtivo, la música de porros abiertos y desechos en el alma puritana, un juglar que apesta a muerte y la muerte que se apresta a seguirme estimulando los otros resortes del alma, el alma que se fue, la bebida que llegó, el consumo que acelera la virtud de el ostracismo, y el círculo de la vida, enviciado en frescas alocuciones, sabias técnicas, para poetas de la mediocridad....mis vasos vacíos, mis venas llenas, mi alma? ...pactada con mi infierno de pérdidas y renunciamientos.