Con la aurora... tu naces resplandeciente
rompiendo la oscuridad.
Y al hacerlo... alejas de mí el temor,
y ahuyentas las pesadillas de mis intranquilos sueños.
Sol que en tu despertar, con suave luz me iluminas,
y con tu tibio calor haces renacer mi vida.
No sabes como te añoro, en estas mis noches tristes,
cuan largas las horas pasan esperando ver tu luz.
Tu que eres fuente de vida, tu que eres el astro rey,
tal vez si te lo pidiera, me podrías ayudar, y apartases de mi vida tanta triste oscuridad.
Tu tibieza en la mañana, aumenta al pasar las horas,
y cuando llegas al zenit, casi tu calor me agobia.
Pero prefiero el calor de tus rayos poderosos,
al
frío y la soledad que a mi alma trae la noche.
Tu que tienes el poder de romper en mil pedazos la cruel oscuridad.
Tu que iluminas mi mundo con diáfana claridad.
Tu que calientas la tierra y haces germinar la vida.
Has hecho que con tu luz, y tambien con tu calor,
haya germinado en mi, la semilla del amor.
Y soy feliz cuando tu luz me ilumina,
y cuando tus tibios rayos quitan el frío a mi alma.
Me asusta la fría noche,
por que no me deja verlo que más quiero en la vida.
Por eso la noche oscura, me da temor y me asusta,
por que a ti yo no te tengo,
y sin ti luz y calor la planta que germinó, sin ello se moriría.
Tu luz aparta de mí las tinieblas de mi mente,
y hace que entienda mejor, tantas cosas diferentes.
Con tu luz veo el camino que yo quise recorrer desde mi temprana edad,
y que la niebla y la noche, no me dejaron hallar.
Por eso te necesito y quiero de ti tener,
la luz que guíe mi vida y el calor que tu me das,
para que en mi la semilla, no muera en la oscuridad.
J.G.L.
Un beso Viejita