Hablando de dolor

¿Quién, el dolor puede entender?
¡No aquél que va en la piel!
Hablo del otro, me refiero a aquél
que rompe la paz del alma
Cuando se sabe y puede querer
Cuando hay paz y mucha calma
Es porque dos seres a flor de piel
expelen amor, fuego y llama
Si el destino en su camino
trunca un amor comprometido
la pena que tras ello deja
con poco o nada hallará abrigo
He llorado una vez más
Al conocer el dolor mortal
El que separa los seres
Y no nos permite reencontrar
Sé, la última no es ni será
Pues cuando se comienza
Es difícil volver a parar
He tratado en no pensar
Consciente estoy por demás
que el fin es siempre la meta
el comienzo fue en un punto
en el que no volveremos a estar
lo más triste y que nos cuesta
es que no se vuelve a vivir
lo que el pasado se lleva
Por eso creo, nadie entiende
Los dolores de amor ajenos
Unos porque jamás lo vivieron
Otros, los que no comprendieron
Que vivir es en pareja
Y cuando dos almas se encuentran
Si alguna es arrancada
o la otra se va o aleja
no importan motivos ni causas
el dolor por siempre acompaña
y sientes que ya no tienes nada