Mirada amiga y bandida

Como ilusión de todos los días,
He esperado dormir y soñar,
Escribir en esta poesía,
Volver atrás y reiniciar…
Quiero recordar una sonrisa angelical,
Penetrante y No superficial
Tanto que he llegado a amarle,
A soñarle y en estos besarle.
Y como el viento que acaba
Que estremece mis sentidos
Así me fulmina su mirada
Con esos ojos bandidos.
Ternura en su hermoso rostro
Su cabello cascada en el desierto
No se compara con otro
Su cabello el más sonoro concierto
Que mis manos contemplan
Y que a mis ojos llena
De euforia latente y saliente
Que me enamora al verle.
No podré decir que soy fuerte,
Ante ti toda mi fuerza es inerte
Pero eres fruta prohibida
Que mi cordura perdida
Jamás soportaría
Ni en la noche ni en el día
Ni siquiera en primavera
Ni en la más ancha vereda.
Y aunque la nostalgia me consume
Tengo que olvidarla
Y dejar de amarla
Pero es su perfume;
No, su mirada, su belleza
No es nada es su creencia
Olvidare que estoy loco por ella?
Ni en la más lejana estrella
Dejare de recordar que es tan bella