Soneto al anhelado paraíso

Mas que vergel soñado en ti diviso,
esperé el tiempo en voluntad decida
Yo supe esperarte toda una vida,
mas que tu paraíso ya no preciso.
Cortés en amar es mi compromiso
en cada día eres mi consentida,
yo seré tu paladín quien te cuida.
Que seas mi amante diosa Dios quiso.
Mi anhelado momento es realidad,
de las manos gozamos felicidad
solo no dedicamos a querernos.
El amor nuestro es de buena simiente
presente y futuro está floreciente.
A la luz de amar ya podemos vernos.
Autor: Alcibíades Noceda Medina