CUERPOS ARDIENTES Y SILENTES

Siento mi amor, que al tocar tus bellas caderas,
como tu cuerpo se estremece y va vibrando,
excitado y al unísono de los latidos de tu corazón,
cuando gimes de deseo en nuestro lecho de amor,
creando las más bellas notas sinfónicas de amor.
Siento que no puedes concentrar tus sentidos y
así no puedes terminar los poemas más eróticos y
lujuriosos de amor, porque tu mente no puede concentrarse,
tu mente solo piensa en sentir y besar mi cuerpo desnudo,
entre tus brazos, lo aprietas con firmeza y fuertemente,
contra tu poderoso cuerpo, rompiendo mis latidos excitados.
Cuando con tesón y pasión nos besamos apasionadamente,
tus dedos se hunden suavemente en mi cuerpo y con caricias,
vas dibujando sobre mi piel como si fuese un suave tapiz y
como si fueran bellas y sentidas notas musicales prohibidas.
Necesito mi amor, poder sentir los aromas de tu piel,
como dulce canción de amor, deseo poder sentir la deliciosa y
la dulce transpiración del salado sudor de tu cuerpo,
por tus excitantes poros y con esas deliciosas gotas,
transparentes como el agua y enardecidas por el deseo.
Necesito poder oler perfumado y el aroma de tu cuerpo,
cuando mi mente desea recordarte o soñarte cada noche,
en la soledad de mi cama en las dulces añoradas y silentes,
noches en que estamos amándonos juntos.
Necesito sentir cada noche los dulces néctares en mis labios,
que desprenden tus tesoros más deliciosos y prohibidos,
que emanas en deliciosas y fecundas cascadas transparentes,
pero cristalinas como diamantes cuando damos rienda suelta,
a todos nuestros lujuriosos deseos en el amor pasional,
con enardecidas pasiones y maravillosos placeres.
Siento tus más dulces susurros de amor en mis oídos y
entrecortados gemidos sordos por la pasión y el deseo,
empapados nuestros cuerpos por el sudor y la excitación,
de nuestros cuerpos desnudos que en esos momentos,
cuando tu cuerpo reposa sobre el mío y unidos se funden,
nuestros dos cuerpo ardientes y silentes en uno.