Como te extraño amor.

Será tu voz la que extraño,
O los gritos de la añoranza,
O la presencia mítica del sexo,
Como salvar este amor del naufragio.
Como única salvación de la tristeza.
Qué importaría mañana con los amores,
Que se despiden, como hábiles mariposas,
Vanidades del alma, perteneciente al resumen.
De cuanto hemos dejado,
Que no perderemos, también, Imaginería y vicio de imaginar,
Que es verdad toda falacia,
Como te extraño amor.
Este instante sujetado por la noche,
Este minúsculo espacio,
Donde tu voz es la piel que tiembla.
Desde el principio de los tiempos,
La que nos hizo nacer mientras.
Temblábamos con ella.
Cuerpo y voz como partes de un cuadro.
Pintado entre las sombras,
Al amparo de los amores que se van,
No importaría mentir si he de salvar,
Esta inmensa pasión, que es todo amor.
No importaría decir cuanto dolor,
Dejaremos en el lienzo,
Cuánta pincelada angustiosa sumaremos,
A la máscara iluminada de los amores.
Enmarcado también en el silencio,
no importaría quedar atrapado,
por la mano que decide de qué color,
será la mueca dibujada.
Copyright © 2010 Ramiro Álvarez Cedeño.