Yo tuve un piscologo en mi ventana
o sea en mi mente llena de atributos,
el decía que me enjuague en las mañanas
y le rinda pleitesías con tributos,
yo tuve un mantel de fino terciopelo
en una mesa de mármol prejuiciosa,
una alfonbra tuve, y mis cabellos
ensuciaban su tela por ser rosa,
yo tuve mil amigos y un hermano
una novia, con sabor a la frambuesa
tres trajes, un reloj en cada mano
y una amante con olor a feligresa,
yo tuve algunos hijos y otros tantos
pañuelos de seda y dos corbatas,
demasiados años tuve y no se cuantos
me perdí en el recorrido de cada etapa,
yo tuve una vecina que me encerraba
en su cuarto a la vista de todo el barrio,
una fuerte gripe tuve y una mirada
entre tantas bestias y cien corsarios,
yo tuve lo que quise, y sin embargo
la angustia en mi alma se desata,
a pesar de los hijos y otros tantos
amores de plástico
que llegan y me matan!