Amor, dijiste

Amor, dijiste.

Y el enojo quedó olvidado,

la tristeza pasó de lado.

Vendaval, tormenta de verano

que todo lo arrasa

y vuelve a salir el sol.

Las palabras de cariño

resuenan nuevamente

como melodiosa armonía

que todo lo traspasa,

como el aire que rodea,

como la cálida esperanza.

Jardín florido de la existencia

son los días del amor;

esplendor de los sentidos

que a la agonía espanta.

Dulces tus palabras de cariño,

sin ellas nada alcanza,

el vacío de la vida

insoportable se alza.

Todo es vano sin tu amor

como una triste mañana.

 Nadia Estelaniz