Son días, claridades oblicuas, en defintiva,
ápices de distancias, que hoy reflotan, a modo
de oscuridad centellante.
Me hablas de distancias, casi de lunas
diferentes, es que sientes nostalgias
de acreedores de la derrota?
Es que ya no quedan similitudes
entre las varias alternativas?
Ya profundizo, asido a la
íntegra disolución de uaa palabra,
me quedan iquietudes, me pelean
las maniobras, me buscan
los demonios de la soledad.
Tu voz seca se aleja, irremediablemente
entre penumbras insolentes....
Que me queda? si la verdad
no fluye donde tiene que parir, y
la vista del futuro acampa
en los montes de las torturas
y de los milagros.
Son días, donde la imagen de
un sueño, quedó prendida
de un viaje sin regreso.