¡Por qué! debo esconder... lo que adentro siento
mejor es... que fluya gota a gota el sentimiento
¡Por qué! detenerme y no manchar el papel blanco
con estas lágrimas de sal, que queman por dentro
No quiero sentir en este día, que me quiebro lento
si pudiera sonreiría para ti, esta gran melancolía
intentando enviarte con los rayos de sol, mi alegría
pero no puedo... y no sabes cuánto, cuánto lamento
¡Comprende! lo que significa para mí, saberte ausente
aunque en mi caminar diario, siempre estás presente
pisando sobre las huellas, que en vida me marcaste
se hace tan difícil la tarea, tratar siempre de imitarte
Me abrazo Padre... a tu bondad que en mí perdura
a tu ejemplo... que el polvo, ni el tiempo han borrado
me derrumbo y grito en silencio, al pié de tu recuerdo
¡Me rindo ante la tumba que te guarda, y me aparta!