Y se apagó la luz...imaginas
solo el destello inberbe de una luna,
me besas, me acaricias las pupilas,
me dejas lo último, aquello que perdura,
te ufanas de que fui tan tuyo
como mía lo eras en mis mañanas,
en la voz, la presencia, el orgullo,
de tenerte para mí..tibia y lozana,
me buscas y ya no me encuentras,
ni tampoco sabrás de mis silencios,
porque he de escribirte esas nuestras
páginas doradas con un solo argumento,
te vas, vida, con la suave madreselva
entre tus cabellos mis dedos aferrando
la tersa inmensidad que aún nos queda...
ven! amor, tenemos que seguir hablando!