Sólo quise, por este medio, decirte aquello que callo,
Silencio obligado, por temor a que las palabras rompan los sueños,
Aquellos sueños que en la vida dignifican el ser de un hombre,
Porque sólo a tú lado me siento hombre digno de ser amado,
Ya que en mi naufragio, pestilente según hoy veo,
Amé, según mi creencia, sin medir a quien, a cualquiera,
Y hoy al conocerte, hubiese querido ser puro,
Para obsequiarte lo que tú me diste y yo no pude,
Y que aunque quisiera lo impío ya esta en mi,
Por ello quise usar las palabras escritas,
Porque serás la única mujer que podrá decir:
“Me dijo te amo”
Y mostrar prueba fehaciente de ello,
Porque ante quienes te digan a mi me lo dijo,
Tú y sólo tú podrás decir:
“A mi me lo escribió”
Y para un poeta, los escritos son inmortales,
Como mi amor es inmortal por ti hoy,
Y si la vida me prestara un volver a nacer,
Lo tomaría, para buscarte y amarte,
En la misma pureza que hoy me entregaste,
Solo quise, por este medio, decirte te amo,
Silencio obligado, por temor a que las palabras me despierten de este sueño.
El sueño que soñé en mi vida,
Y hoy tú lo has logrado.