Recuerdas aquella noches tan cercade las luces
Posados en el cristal, reflejando el instante del beso,
Sin horas ni calendarios, abrigados por el latido
Que rugía en la cresta de una ola
Que chocaba con los labios.
Recuerdas esas anticuadas voces tornear
En la médula del tímpano
Y quedarse inertes, disecadas
Abrazando al sonido
Como una visión del futuro.
Recuerdas aquellas palabras
Venciendola osteoporosis en la sed de seguir viviendo,
En aquellaspuertas que abren Cerraduras
Y versan con los cuadros
Que acopian semejanzas al entusiasmo.
Recuerdas mis ojos llorosos
Bebiendo del polen de unos silencios,
Consumiendo inerte besos disfrazados
Junto a la cornisa del mar mediterráneo.
Recuerdas, mientras olfateas mis letras
Y presumes de ver el aire,
Que se arruma en tu mentón
Y cosquillea con el moreno de tus senos,
Y juega a Pinocho con tus secretos.
Recuerdas aquella noche de primavera
Danzando por la madrugada
Como dos vampiros necesitados de sangre,
Merodeando por los ojos sin ecos,
Desnudando tu cuello, sedando con besos,
Un mordisco de amor.