como en un cuento

Agazapada en la noche

, un alma inquieta,

más que reposar , se posa

, sobre jardines de piedra.

Perdida toda esperanza

y sumida en el dolor,

se sabe para el amor..

ya prácticamente muerta.

Hoy las lágrimas calientes

resbalan por sus mejillas

y va lanzando a hurtadillas

miradas semi valientes.

No alcanza a ver la otra orilla

ya.. apenas nada siente,

ni se queja de su suerte

pues le parece mentira.

Cuando los ojos vencidos

por el sueño, se le cierran,

le hacen guiños las luciérnagas

y algún lucero encendido..

La figura de un caminante

se le acerca dulcemente ,

con cuidado , con sigilo.

Permanece allí mirándole,

el corazón va a estallarle

los labios a delatarle,

pero no .. no hace ruido.

No debe de verlo nadie,

eso le causa tristeza,

ni esta que es su princesa,

tampoco puede tocarle..

menos mal que con los ojos,

puede decirle piropos,

amarla mucho y besarle.

Y así , como el viento, se aleja..

más lo hará sólo en la distancia,

no le dejará constancia,

ni formulará una queja…

no serán una pareja,

pero siempre se amarán.

y ella nunca lo sabrá

que su amor está tan cerca.