Consérvame las ganas
de acercarme a tu boca,
de encerrarme en tu vientre,
que me invita desde siempre
y mi vida vuelve loca.
Consérvame las ganas
y el anhelo de tenerte,
que al momento que te veo,
es tu cuerpo que deseo
con mis manos poseerte.
Detén en mí tus labios
que me toman cuales brazos,
envolviéndome en un beso,
en un sueño que embeleso
y me atan como lazos.
Consérvame como eres,
a vivir en tu mirada,
que tus ojos aún incitan
y a los míos los invitan,
que me ciegan a la nada.
Consérvame tu entrega
y la limpieza de tu alma,
que mis manos al tomarte
cuidarán de no dañarte,
al unirnos en tu cama.
Consérvame completo
y fielmente enamorado,
manténme en ti perdido,
que esas ganas que he sentido,
no se vuelvan un pasado.