Tu Piel Que Encendía...

Dilata tu calor sobre mi piel Y desbordas con sudor tu respiro. Llegando lentamente a encender Una pasión, un amor y un cariño Prendías mi cuerpo con un candil Con el candil fulguroso de tus labios Donde rápidamente llegaba a latir Cuando estuve entre tus brazos Poco a poco desenfrenaba un suspiro Y perdiendo el control de las horas Derramaba como el aceite de olivo Un beso con tu boca y mi boca. Siendo testigo aquella estancia. Que nos vió en el eufórico momento Que se amaron tu alma y mi alma En aquel fulguroso encuentro.