Me sumerjo con pasión por el mar
embravecido de tus caricias, mientras mi
deseo en tu luna, mis vértices conjura
Me sumerjo con ganas, aguerridas manos
posicionando tu voluntad, marcándome
a fuego lo amante de tus desbordantes delicias
Me sumerjo y venero tu recorrido por mi geografía,
revelándome la inmensidad y necesidad de que
converjas en lo interior de mi delirante epicentro
Me sumerjo mientras a fuego lento mis montes
atrapas, mi cintura amarras y dando la
espalda al mundo, soles de placer, desbordamos
Me sumerjo en tus ojos, mientras sujetamos el
momento para plasmarlo en lo inmenso, para devorarlo
entre tus saciadas palabras y mis hambrientos silencios
Precioso poema con metáforas elegantes. El Mar... Edén del poeta... Tu diez aunque no lo pude plasmar. Saludos, Ivette Rosario.