La esperanza de un cielo

El día que venga y me piense en llevar,
que sea de Dios y no de otro lugar
que tenga el camino que voy a pasar
las rosas que tuvo mi hijo, allá en el altar.
Quisiera que el sol que me va alumbrar
Me tenga el encanto que me ha hecho soñar,
Y pueda encontrar para siempre el lugar,
Donde hijo y padre podamos jugar.
Voy a tratar de pronto llegar
Al cielo que tiene ese bello lugar,
Y juntos un día poder disfrutar
Del cielo que todos podemos desear.
Voy a seguir la fe del amor
La mano del Santo que da ese calor
Las dulces palabras del gran creador
Que al fin de este mundo, nos una el amor.
Todos un día podremos estar
presentes por siempre en ese lugar
y ver que la dicha nos puede hoy dar
el amor que un día pudimos buscar