Hoy…
pero no sólo hoy
estás aquí
después de un largo partir;
vives eternamente en mi lugar,
en este espacio inmenso
siempre cubierto de risas
con las que a solas,
y lejos ya de aquí,
delineaste toda la calma
de un nuevo amanecer sin ti.
Hoy…
pero no solo hoy
en esta presencia tuya
con que te asomas
quedo desde ti,
vibra tu voz en la palabra viva
que en el andar de las fechas
siguen aún sonando ciertas,
como cuando aún tu
en el mudo asentir del ayer
jamás dejaste de ser
lo que hoy tengo de ti.
Hoy…
pero no solo hoy
estás conmigo,
en este presencia tuya,
con la que llegas
como llegaste antes del partir,
con esa firmeza hecha ternura
y mil voces vibrantes
que aún hoy siguen resonando
como si fuese ayer
la tarde cuando tú
pensaste en no morir,
para quedar,
eternamente hoy…