A mi amada esposa.

Quisiera poder entender, esto que estoy pasando,
con què intensidad estoy amando,tan fuerte y no quiero ceder,
con tus amores mujer, lo hermoso estoy alcanzando
y al pasado desgarrando, hacièndome renacer.
Es tu mirada tierna, tan profunda y penetrante,
me cautiva en un instante, sanando mi alma enferma,
y a veces me tiemblan las piernas, sobre todo en ese instante,
enque tus besos me imparten, como el agua vida interna.
Aùn me cuesta comprender, la hermosusra en tu mirada
cuan perfecta y retratada, en el fondo de mi ser,
es tu hermosura Mabele, por mi corazòn captada,
como hermosa noche estrellada, cuàn hermosa y bella mujer.
hoy me siento bien contento, pòr haberte conocido,
ya que en tu amor he podido, darle corte a mis lamentos,
y desechando mis tormentos, puès yo soy un convencido,
de por formar un nido, donde no hayan susfrimientos.
Mi anhelo esque digas que si, puès yo te voy a cuidar,
con locura te voy a amar, quisiera embriagarme de tì,
saturarnos porque asì, la dicha nos va a embargar,
y podràs tu comprobar, que yo vivo para tì.
En tan grande lo que siento, tu me has vuelto la alegrìa,
ya no hay melancolìa, ya no vivo en un desierto,
pero algo si te advierto, te amarè todos los dìas,
ya que pienso todo el dìa, en este fuerte sentimiento.
A ti mi amada te digo, que hay mucho por què vivir,
y te agradezco por elegir, a uno que añora tanto,
que nunca vuelva el quebranto, y a tus amores desea ir,
te doy gracias por venir, y que nunca nos cubra el llanto.