En estatua de barro te convierto,
dices que me amas,
yo no sé si es cierto...
Tal vez pueda amarte,
pero no es certero.
No te refugies en mí,
puedo lastimar tu ego.
No me abras el cofre de tu vida,
puedo entrar en él y ser tu agonía.
No soy real en tu presencia,
puedo dejarte una honda herida.
Mis palabras son locura,
que no determinan revolución alguna.
Le haré daño al ocaso de tu vida,
yo soy luz resplandeciente,
que brilla en el otro lado de la esquina.
No te enamores de mí,
tan sólo soy una mentira.
Elsa Fariña
11/04/04