Crimen perfecto

Lo amordazamos y lo encerramos
En una habitación de tres por dos.
Cada noche, dormía a nuestro lado
Pero ninguno de los dos lo notó.
Lo sedamos con besos amargos
Lo envenenamos con dolor.
Ya no me gustaba tenerte al lado
Y tus oídos eran sordos con mi voz.
Tú lo golpeabas a diario con tus dudas
Y yo lo remataba con un puntapié.
A veces se reanimaba, a veces respiraba
Pero moría por culpas del ayer.
Dime si notaste que él agonizaba
Cuando tú decías que nada funcionaba.
Para ser sincero, lo escuché gritar
Cuando en una noche no te quise besar.
Fuimos cómplices de esta tortura
Fuiste socia de un criminal
Nuestro amor murió por culpa
De dos niños que jugaban a amar.
Que no quede rastro
Que no queden huellas
Que nadie sepa que aquí
Nacieron nuestras penas.
Que no quede nada
Que quede limpia la escena
Para que nadie se entere
Que el amor, se convirtió en tiniebla.