Un ladrillo en la pared.

Galpón de zinc caliente, hielo en los letargos,
el pasadizo secreto de las botas y sus misterios,
cordón del hombro contra hombro, saturadas vaginas, odios consumados, éxtasis del morbo y la indecencia, vahído...huelo sangre sin estar omnipresente, veo animales pequeños, sed de hambre, lujuria de malas praxis....
Grito, fuertemente, asiente mi cabeza, asumo los riesgos, desvanezco imágenes.....
Mujer! pequeña delicia que a la tortura te inmolas, habla, grita, aceptalo, fuiste tu!
pero no sufras mas, no encadenes tu alma
al odio de estas bestias esteparias...Gritalo! jura que hiciste lo que te dicen...eso te salvará..no me sigas torturando al verte desangrar
la savia de tu espanto...quiero morir en tu lugar..
quiero...morir sin pedirte perdón.